La tradición del día ANZAC

Cuando estalló la guerra en 1914, Australia había sido una nación federada con tan sólo 13 años de edad, y el nuevo gobierno federal estaba ansioso por mejorar su reputación ante las naciones del mundo. Cuando Gran Bretaña declaró la guerra en agosto de 1914, Australia se colocó automáticamente del lado de la Commonwealth. En 1915 los soldados australianos y neozelandeses formaron parte de la expedición que se propuso capturar la península de Gallipoli con el fin de abrir los Dardanelos a las marinas de guerra aliadas. El objetivo final era capturar Constantinopla (actual Estambul), la capital del Imperio Otomano, aliado de Alemania.

Las fuerzas de Australia y Nueva Zelanda desembarcaron en Gallipoli el 25 de abril, ante una feroz resistencia de los defensores turcos otomanos. Lo que había sido planeado como un golpe de audacia para sacar a Turquía de la guerra, se llegó rápidamente a un punto muerto, y la campaña se prolongó durante ocho meses. A finales de 1915 las fuerzas aliadas fueron evacuadas de la península, con ambas partes sufriendo fuertes bajas y grandes penalidades. Más de 8.000 soldados australianos habían sido asesinados. La campaña de Gallipoli tuvo un profundo impacto en los australianos,  y el 25 de abril se convirtió en el día en que los australianos recuerdan el sacrificio de aquellos que murieron en la guerra.

Aunque la campaña de Gallipoli fracasó en sus objetivos militares, las acciones de Australia y Nueva Zelanda durante la campaña dejó todo un legado de gran alcance. La creación de lo que se conoció como la "leyenda de Anzac" se convirtió en una parte importante de la identidad de las dos naciones, cambiando la forma en la que los australianos miran su pasado y su futuro.

Los australianos reconocen el 25 de abril como una ocasión para la conmemoración nacional, que se toma dos formas: Servicios conmemorativos que se llevan a cabo en la madrugada (la hora del desembarco inicial) en toda la nación. Más adelante en el día , los ex militares y mujeres militares se reúnen para participar en las marchas a través de las principales ciudades y pueblos del país. Las Ceremonias conmemorativas son más formales y se celebran en los monumentos de guerra en todo el país. De esta manera, el Día de Anzac es un momento en el que los australianos reflexionan sobre los diferentes significados de la guerra.